El
pasado mes de junio nos despertábamos con un titular más que esperanzador “Cerca
de una treintena de estudiantes comienzan sus becas en el Ayuntamiento de
Quintanar de la Orden”, en él, su alcalde, el popular Carlos Madero, la
Concejala de Ciudadanos Begoña Rodriguez y el responsable de RRHH del
Ayuntamiento hablaban de una medida pionera en la localidad, 30 estudiantes
tendrían contacto con el mundo laboral y además cobrarían 300 euros brutos al
mes durante los dos meses de duración que tendrán las prácticas. Ésta era la propaganda y ahora de vienen las
noticias.
Desde
Izquierda Unida en Quintanar de la Orden, queremos poner de manifiesto cómo,
una vez más, populares y ciudadanos bajo titulares vuelven a engañar a la
mayoría social de nuestra localidad, esta vez de la manera más cruel posible,
utilizando a la juventud para denigrar a su nivel más precario las relaciones
laborales, sin ni si quiera ser capaces de ofrecerles un plan de empleo
destinado para ellas y ellos con condiciones dignas y utilizando el concepto de
beca para llevar a cabo un plan de empleo con mano de obra precarizada en su
máximo exponente.
Bajo
esta perspectiva de cómo entienden la creación de empleo en Quintanar de la
Orden proponemos un titular más adecuado “Cerca de una treintena de estudiantes
sacarán adelante las vacaciones y sustituciones de los y las trabajadoras del Ayuntamiento
ahogados en la más absoluta precariedad y bajo una mano de obra semiesclava”.
La
juventud de nuestra localidad, en proceso de obtener un titulación superior
cuyo salario podría ser perfectamente el de un nivel A2, es contratada para
suplir las vacaciones del personal del Ayuntamiento y además, son relegados a
sacar adelante todo el trabajo atrasado del mismo gracias a la inacción de los
gobiernos que pasan por el Ayuntamiento, todo ello con mano de obra de oferta, un
salario de 270 euros netos al mes y unos 2,7 euros la hora de trabajo.
Esta
beca, o plan de empleo encubierto,
además, abre la puerta al enchufismo dentro del Ayuntamiento, pues dentro de
sus bases no se especifica en ningún apartado que no une ninguna relación
laboral con el Ayuntamiento, por lo tanto una vez acabado el trabajo, se puede
tener la tentación de pedir la plaza que actualmente ocupan. Por último estas
bases se sitúan en la ilegalidad cuando se pide el empadronamiento para
realizar un trabajo.
Quintanar
de la Orden, que ocupa el dudoso honor de ser la cuarta localidad con más paro
de toda la provincia no puede permitirse un modelo precario, donde la mano de
obra semiesclava sea la nota dominante de la contratación realizada, donde el
salario que se perciba se sitúe muy por debajo del salario mínimo interprofesional,
donde escondan esta realidad cambiando la nomenclatura.
Este
Ayuntamiento está más preocupado por dar un titular que por atajar la situación
lamentable que atraviesa nuestra localidad, llena de ciudadanos y ciudadanas
que quieren salir de la situación de absoluta precariedad que soporta diariamente y tiene que ver como sus gobernantes, además, se
vanaglorian de ello. El bipartidismo
alternado, ahora con un alcalde que es capaz de convocar un pleno para subirse
el sueldo y con su concejala, ambas con un salario nada precario, ahogan
nuestra localidad.
La
medida que proponen y anuncian a bombo y platillo efectivamente es pionera,
pero lo es por plantear a la juventud de Quintanar de la Orden una experiencia
precaria para sus vacaciones de verano y les enseña el futuro que con estos
gobiernos les espera, solamente en nuestras manos está la llave para poder
cambiarlos.